Respuesta de Lama Ole:
Nuestras acciones, pensamientos y palabras de vidas anteriores –nuestro karma– funcionan como una especie de pegamento, como algo que hace que las cosas se cristalicen en las posibilidades del espacio. Luego encontramos padres en el momento que hacen el amor, nos adherimos al óvulo fertilizado y nacemos. Y lo que nos ata aquí es causa y efecto, y nuestra ignorancia al pensar que somos limitados. Estamos atados aquí porque las condiciones están dadas, porque un gancho y un anillo se juntaron, porque no podemos ver la mente como luz clara, sino que nos identificamos con el cuerpo.
Si pensamos que somos nuestro cuerpo, nos engañamos a nosotros mismos. Más bien, tenemos un cuerpo. El cuerpo es algo con lo cual podemos trabajar, pero nuestra verdadera naturaleza es luz clara. Mientras no se reconozca esto, creemos que somos nuestro cuerpo y experimentamos la vejez, la enfermedad, la muerte y todas las dificultades que acompañan a estos conceptos. El Buda nos muestra la experiencia de que realmente somos luz clara. Esa es la meta. El cuerpo es nuestra herramienta, la cual usamos para el beneficio de todos –sin experimentar altibajos, sin expectativas ni temores, sino simplemente porque se siente muy bien.