Respuesta de Lama Ole:
Siempre pienso que el karma de la gente no era lo suficientemente bueno, y continúo felizmente con el siguiente trabajo. Si siempre haces lo mejor que puedes, el resto es el karma de las personas.
Cada quien tiene su propio karma. Uno solo puede ayudar a los demás si se juntan un anillo y un gancho, si hay apertura. Si esto no es posible, uno tiene que darles pasivamente energía positiva, y en algún momento –cuando se olviden de pensar en sí mismos– esta penetrará.
Naturalmente, también depende de qué tan hábilmente presentes las cosas. Hay personas que podrían vender ropa interior larga en el Sahara y otras que ni siquiera podrían venderla en Groenlandia. Si no logras comunicarte con alguien, entonces reconoce tu falta de experiencia e intenta aprender algo. Quizás más adelante haya una situación en la que puedas manejarlo mejor.